3 ideas para el trabajo en equipo
En Senssia uno de nuestros pilares es el trabajo en equipo, que expresamos como «la apuesta por la cooperación y cuidar al máximo el ambiente de trabajo y las relaciones interpersonales.»
Tienes disponible cantidad de literatura sobre el trabajo en equipo y el liderazgo, y nos encanta saber cada día un poco más sobre esta “ciencia” y aprender tanto de las experiencias propias como de las ajenas. En este artículo queremos darte un pequeño aporte y reflexión a una temática tan importante como apasionante.
Como puedes leer en muchas definiciones sobre qué es un equipo, se trata de “un grupo de dos o más personas que interactúan y trabajan de forma coordinada y cooperativa, unidas por un objetivo común”. Si pensamos en cualquier deporte, lo vemos muy claro, sin embargo, en el mundo empresarial esto no siempre es así. Las personas que conforman “un equipo” no siempre trabajan de forma coordinada y, aunque no parezca probable, con objetivos incluso diferentes.
En Senssia uno de nuestros pilares es el trabajo en equipo, que expresamos como la apuesta por la cooperación y cuidar al máximo el ambiente de trabajo y las relaciones interpersonales.
Y es que esto es muy importante porque solo trabajando como un verdadero equipo se puede llegar a alcanzar los objetivos, a satisfacer al cliente, a cumplir con alto grado de excelencia. Además, cuando las tareas son complejas, cuando abordamos proyectos, es necesario contar con personas que asuman la responsabilidad y la acción para realizarlas con éxito.
Aquí compartimos 3 pautas sencillas que nos permiten identificar si un equipo está trabajando como tal, o si tiene margen de mejora para elevar su rendimiento y resultados.
Alinear a todos los miembros en la misma dirección
A la hora de alcanzar un objetivo, ¿están todos los integrantes del equipo alineados con el mismo? Es importante trasladar a cada una de las personas la importancia del objetivo. Su razón de ser, el por qué y para qué, y los pasos para llegar a conseguirlo. En pocas palabras, que cada miembro del equipo “haga suyo” el objetivo, y por tanto todos trabajen y empujen en la misma dirección.
¿Cómo conseguirlo? Las reuniones de grupo, las conversaciones individuales, el coaching, etc., son herramientas muy útiles para clarificar y establecer objetivos, así como ayudar a otras personas a que los integren y hagan suyos.
Seguir al líder
Un equipo debe tener un líder que ejerza como tal, y ésta no es una tarea fácil. El líder tiene, o debe tener, mayor responsabilidad que cualquier miembro del equipo. Hay muchas actitudes que debe tener en cuenta el líder para guiar al equipo, y es más positivo que sea en un contexto de influencia en lugar de “yo ordeno y mando”. Y ni que decir tiene que, los líderes tocan a uno por equipo (¡ninguno/a más!).
¿Cómo conseguirlo? Guiar con el ejemplo: actuar. Comunicar de manera efectiva: escuchar y hablar. Reconocer y aprender de los errores… Son algunas de las acciones que todo buen líder lleva a la práctica.
Unir capacidades (generar sinergias)
Esta frase resume muy bien este punto: “Ninguno de nosotros es tan bueno como todos nosotros juntos.” Y es que en esto consiste la “sinergia” («synérgeia o synergía», que significa cooperación, concurso de fuerzas), en que el resultado de la unión de varias partes es superior a simplemente su suma.
¿Cómo conseguirla? Un ejemplo de sinergia es cuando existen sólo dos alternativas, entre dos personas, y en lugar de discutir sobre cuál es la mejor, buscan una tercera que les sirva a ambos. Esto será más positivo y armonioso que si una de las dos partes tiene que aceptar la posición de la otra.
Para conseguir sinergias efectivas es obligatoria la colaboración y cooperación entre las partes que participan.
Para finalizar, compartimos este vídeo que explica estas pautas anteriores de una manera clara y además, emotiva.
“Si quieres ir rápido camina solo, si quieres llegar lejos ve acompañado.”
Proverbio africano